Cómo fabricar arcos de softcombat 3: el arco.

Lo primero que haremos será preparar los tubos de PVC para que formen el arco.
Comenzaremos con la pieza de 20mm. de diámetro. La cortaremos por la mitad, encolaremos ambos pedazos y los meteremos en los extremos del tubo de 25mm de diámetro por 150cm de largo. Para sujetarlos podéis usar un poco de cinta aislante o cinta americana. Mientras esto seca pasaremos a la segunda pieza.

En segundo lugar, cogeremos el tubo de 75cm. de largo y lo cortaremos por la mitad de forma longitudinal, es decir, a lo largo, de modo que al final nos queden dos piezas de 75cm. de largo y semicirculares.
Para hacer esto podéis ayudaros trazando una línea en toda la longitud del tubo que os haga de guía. Si lo hacéis, utilizad un rotulador indeleble, y en lugar de regla podéis utilizar un cordel bien tensado que vaya de extremo a extremo.

Poneos los guantes, coged la sierra y comenzad a cortar con calma y paciencia. Hacer este corte recto es muy difícil, pero al menos tenemos que procurar que sea lo más recto posible y que las dos mitades en que vamos a dividir el tubo sean lo más parecidas posibles.

Una vez realizado el corte, utilizaremos la lija para eliminar los cantos vivos de esta pieza que acabamos de cortar. Pasad la lija por todo el corte para que el canto del PVC quede redondeado y posteriormente no corte la cinta aislante con la que lo vamos a cubrir.

La pieza de 75cm. que hemos cortado, la colocaremos centrada sobre el tubo de 150cm. para ello, con ayuda de un metro y el rotulador haremos dos marcas que nos indiquen donde debe ir colocada la pieza. Marcaremos entre que dos puntos vamos a colocar la pieza. Si la pieza tiene 75cm y el arco 150, deben quedarnos un total de 75cm libre a repartir entre los dos extremos, por tanto, debemos hacer una marca a 37’5cm, de cada extremo y colocar la pieza de 75 entre ambas. Utilizamos un poco de cinta aislante para fijar la pieza.

Una vez colocada la pieza, procedemos a recubrirla completamente utilizando la cinta aislante de 50cm. Hay que recubrir la pieza completamente, y también un poco de la parte del arco sobre la que no está la pieza. Dadle una vuelta completa de cinta aislante, sin dejar huecos entre ella, montando un poco cada vuelta que demos sobre la anterior. Si queréis podéis darle una segunda capa de cinta aislante, es opcional.
Ahora la parte más difícil.

Tenemos que trazar una línea recta a lo largo de todo el arco, de forma que pase por el centro longitudinal de la pieza que acabamos de colocar y forrar. Esta línea es la guía que nos indicará donde debemos realizar los cortes en los que colocaremos la cuerda.
Para esta operación os recomiendo coger un cordel bien largo y un rotulador indeleble. Pasad el cordel por dentro del tubo, sacadlo por el otro extremo y haced una lazada por donde pueda correr el otro cabo del cordel, el que va por fuera. Tirad bien del cabo que acabáis de pasar por la lazada, de forma que quedará tenso. Ahora tenemos un cordel tensado que pasa por dentro y por fuera del arco. Sólo hay que mover el cordel para que la parte exterior pase por encima de la pieza forrada de cinta aislante. Aseguraos de mantener la tensión y de que la línea es bien recta. Ahora con el indeleble utilizad la cuerda de guía y marcad una raya en los extremos del arco, de unos 7-8cm. de longitud.

Haced una marca a 2'5-3cm. de cada extremo. La marca debe tener 1cm. de longitud. Después, con la línea guía frente a vosotros, dibujad en cada extremo de la marca de 1cm., otra raya de 1cm. que tenga un ángulo de 45º respecto a la primera y que baje hacia el centro del arco. No es fácil de explicar, así que os pongo un diagrama.

Esta marca es la que nos guiará a la hora de cortar. Utilizamos la sierra de mano para cortar por la marca, comenzando por el punto en el que se cruzan la línea larga que hicimos primero y la marca que hemos hecho a 5cm. Cortad con calma e intentad inclinar la sierra para que pueda seguir la guía que hemos dibujado (la que va inclinada a 45º). No os paséis con el corte, es muy importante no superar la medida de 1cm, ya que si nos aproximamos a la mitad del tubo, cuando lo utilicemos se puede debilitar ese punto, y si se rompe es muy peligroso.

Ya se nos rompió una vez y el extremo del tubo salió despedido. Por suerte no golpeó al tirador ni paso nada. Repito una vez más, nunca bajo ningún concepto el corte debe superar la mitad del tubo (1’2mm.), ajustarlo a la medida anterior y lo habremos hecho bien.
Esta ranura es donde irá colocada la cuerda, y cuando tensemos el arco es de donde la cuerda tirará, produciendo la tensión del arco y dándole la fuerza.
Como el cordino es de 2mm., no va a entrar en el corte que hemos realizado, así que hay que hacerlo un poco más ancho.
Para esta operación cogemos el pliego de lija, cortamos una tira de 1-1’5cm. de ancho y la colocaremos en la ranura. Ahora la cogemos por los extremos y la frotamos, como los limpiazapatos de antaño sacando brillo con un trapo, movemos la lija de un lado a otro, de forma que al pasar por la ranura la irá desgastando poco a poco. Utilizad la cuerda como guía para ver si entra o no entra, y cuando entre habréis finalizado. Si la lija es de papel no podréis hacer esta operación, por eso tiene que ser de tela.
Aprovechad esta operación para que la ranura donde va ha ir la cuerda quede bien redondeada en sus bordes, así evitamos que la cuerda se deteriore cada vez que encordemos y desencordemos el arco.